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jueves, 23 de agosto de 2012

En Cataluña ya no quedan delincuentes por perseguir

Esta es la única explicación posible al desproporcionado despliegue que encontré ayer en la puerta de la estación de cercanías al llegar a mi barrio. ¡Estaban los mossos de escuadra! Me quede impactada.

Dos revisores, uno a cada lado de la puerta, varios guardias de seguridad con perros también al lado. Por si fuera poco, una vez pasada la puerta y las puertas automáticas, los mossos de escuadra en la puerta exterior.

Me sentí como una delincuente, mientras buscaba en el bolso mi billete para mostrarlo al revisor.

¿De verdad es necesaria semejante movida para pillar a algún despistado que ha pagado un billete de una zona menos?
Si, porque eso era lo que había, un señor con un billete pagado pero no del importe que debía, hablando con el revisor. No creo que se librara de la multa. Le explicaba que había pedido un billete en la taquilla para este destino y ese era el que le habían vendido...

Lo cierto es que ahora no veo nunca a nadie colarse sin pagar. No es como en el metro, donde abundan los "saltavallas".

Era el colofón, después de un viaje divertido. Si quieres aventura, no contrates un paquete vacacional de deportes de aventura, ni hagas un safari...¡viaja con Renfe!

Nos hicieron cambiar de tren a mitad de trayecto por una supuesta avería en el aire acondicionado. Digo supuesta porque se estaba fresquito y no se notaba que pasara nada con el aire. En el nuevo tren no se si funcionaba o no porque ¡Estaba apagado! Media hora larga pasando calor, en plena ola de calor imaginaros que bien. Tampoco funcionaba la megafonia en la que una grabación avisa de las estaciones. El propio maquinista se encargaba de anunciar por el altavoz.

Llegue a casa tarde y mareada del calor.

Mientras hablo de las maravillas de Renfe estamos en l tren parados desde hace unos minutos. No se si es una de esas paradas que hace a veces para esperar que pase otro tren para poder pasar o es que hay algún problema. 

Bueno, parece que ya arrancamos, ¡Menos mal!